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Este Viernes mi mujer me regaló por mi santo el primero tomo de Locke & Key. Poco había oído de este cómic salvo que Spielberg había adquirido sus derechos para llevarlo a la pequeña pantalla, pero si el gran Agustín de Edición Limitada (excepcional tienda de comics de la que os hablaré en breve) se lo había recomendado, estaba convencido que me iba a gustar... y no sólo me ha gustado ... ¡ me ha encantado !
Como he comentado varias veces en el blog para mí lo más importante a la hora de decidirme por un cómic, película o libro es la idea, y Lockey Bienvenidos a Lovecraft crean un universo que mezcla el terror y la magia de manera espectacular.
Con un inicio brutal (balazo en la cabeza incluido) el guionista Joe Hill te coge por la solapa y sólo afloja su agarre al final del tomo ... y tengo la impresión que sólo para que cojas aire para lo que te espera.
Locke & Key está repleto de viñetas que te dejan con mal cuerpo y el dibujo del chileno Gabriel Rodriguez, si bien al principio no encaja con el universo tétrico de Hill, en cuanto surge la violencia se adapta perfectamente creando un cómic de altísimo nivel.
Una vez leído este tomo (como ya os he comentado sin ningún conocimiento previo) he investigado descubriendo que Joe Hill es nada más y nada menos que hijo de Stephen King, lo que no sorprende nada tras adentrarme en el mundo de llaves mágicas y fantasmas de Bode y compañía.
Lo dicho, Locke & Key (ganadora del Eisner al mejor guionista en 2011) es una lectura imprescindible. La semana que viene iré a por el segundo tomo.
Imprescindible del mismo guionista The Cape, la historia de como una mala persona que adquiere superpoderes sigue siendo una mala persona, pero con superpoderes. Y eso da mucho miedo
ResponderEliminar... "El gran Agustín de Edición Limitada", quillo, eso suena a peloteo o cambio por algún que otro descuento en la compra de tebeos.
ResponderEliminar¿Excepcional tienda de cómics? vaya, pues será cuando está cerrada, porque mientras está "el grande" (yo más bien diría "grueso") no pasa de maleducado, pesado, pesetero y de recomendaciones más que dudosas (sobre todo cuando tiene demasiado material invendible acumulado en sus estanterías).
Anda, tómate una lata o no podrás seguir ocupando silla en la mesa de juego...
Todos los comentarios anónimos son bien recibidos (si bien no compartidos)... voy a por mi lata; ¿puede ser se fabada?
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